lunes, 11 de junio de 2012

Capítulo 6 - Interludio -

Si matadme, me lo merezco xDD me había olvidado de subir el cap al blog ;___; pero bueno, solo han pasado un par de horas DD : (ya me vale...)

Bueno no importa >___<  aquí os dejo el cap 6! Vamos a ver un poco que piensa nuestro neurotico delegado :3 ¡Animo Nath! (y liate con Castiel de una vez ) xDDD lol

-----------

Capítulo 6 - Interludio -

Me desperté bastante aturdido, no había dormido nada…. Algo lógico. ¿Quién diantres conseguiría dormir después de haber pasado semejante situación? La cabeza me daba vueltas nada más recordarlo. ¡Qué vergüenza! ¿Por qué a mí?

A ver, lo primero era aclarar las ideas. ¿Por qué ocurrió aquello? No lo sé. Quizás una fuerza sobrenatural se apoderó de nuestros cuerpos. Ojalá fuese cierto…

¿Qué habría pasado si no hubiese aparecido Lysandro? Creo que todos sabemos la respuesta, y realmente me aterra. ¿Qué significaba todo ésto?

Jamás me había planteado que me pudiese gustar Castiel. A ver, era guapo y… espera. ¿En qué coño estaba pensando? ¡Era Castiel! Oh dios, algo no funcionaba bien en mi cabeza; a mí me habían tenido que drogar el café o algo.

Conclusión: tenía que acordar con este pelirrojo de bote que solo había sido un calentón momentáneo, causado por las feromonas adolescentes, muy frecuentes de la edad, pero que no significaba nada y por tanto, lo mejor era olvidarlo y hacer como si nada de esto hubiese pasado.

Claro que, conociendo el temperamento de Castiel, lo único que conseguiría era que me volviese a acorralar contra la pared.

----
Tras media hora en el baño intentando tapar el chupetón, opte por ponerme una tirita. Al menos podría decir que me había picado un bicho. Sí, es un poco patético, pero lo prefiero a decir la verdad.

Salí con tiempo de sobra para llegar temprano al instituto. Aún tenía que recuperar mi corbata antes de que la viese alguien y pensase…. Bueno, lo que “fue” en realidad (ya era la segunda que perdía).

Sin parar siquiera en la sala de delegados, fui corriendo a la clase. Si no recordaba mal, estaba en el fondo del segundo pasillo, un poco más allá del auditorio… ¡Maldita sea! No recordaba el número de la clase.

Entré en cuatro o cinco aulas hasta dar con ella, no fue muy difícil de reconocer. Primero, porque estaba encajada; y segundo, porque las mesas más cercanas a la puerta estaban algo movidas.
Busqué por todas partes; suelo, mesa e incluso estanterías. Nada, no estaba. Sólo me quedaban diez minutos para que llegase todo el mundo y aún no había encontrado mi corbata.

Todo era perfecto, ya solo faltaba que la descubriese Peggy  y me pusiese como artículo principal del periódico:
“¡Corbata del delegado principal encontrada en una de las clases!¿Tendrá nuestro delegado otro “asunto” más para quedarse hasta tarde en el instituto?”
Qué mal me caía esa tía.

-:-
Como de costumbre, al terminar las clases me fui a la sala de delegados. Esta vez  Melody estaba allí. Sé que quedaba mal decirlo por mi parte, pero tenerla por ahí haciendo un trabajo en que cierto modo era mío, era un alivio. A ver, no penséis mal, me gustaba mi trabajo, (si es que lo podía llamar así)  pero últimamente había tenido cierto “problema”; ya me entendéis.
— Nathaniel buenos días, ¿de nuevo una mala noche? — dijo Melody al verme entrar con una sonrisa de lo más sincera. Debía ser la única que se ponía feliz al verme. — ¡¿Qué te ha pasado en el cuello?!-- sus ojos se abrieron como platos pero no tantos como los míos.
Empecé a palidecer. ¡Joder! Que vista tenía. No lo entendía, en serio. ¿Por qué me miraba siempre tanto?
— Nada, solo un mosquito… Muy grande — bravo Nathaniel, una excusa de lo más creativa. ¿Un mosquito? ¿En serio? Sí, claro, uno con el pelo rojo y cara de pervertido.
— Ya…. — dijo dudosa. Estaba claro que no se lo había creído. NADIE se lo hubiese creído. — Por cierto, mañana es la excursión cultural, el fin de semana completo. Todos han entregado su justificante, incluso Castiel.

“¡NOOOOOOO! ¡Por favor no digas ese nombre!”

— Nathaniel, estás blanco — dijo preocupada.
— Sí, bueno, una ligera indigestión. ¿Me decías? — bien por mí, pues parecía haber desarrollado cierta velocidad mental para crear excusas estúpidas. Suspiré cansado mientras apoyaba la frente en una de mis manos.
— Mañana tenéis que estar aquí a las diez, tres horas de autobús hasta la ciudad. El primer día es libre, el sábado visita por la mañana y tarde libre. El domingo, mañana libre hasta coger el autobús de vuelta. Ahora que lo pienso, tenéis mucho tiempo libre. — explicó con cierta tristeza.  Pese a todo, también le hubiese gustado ir. — ¡Ah! Las habitaciones son por parejas.
— Me da igual compartir habitación con quien sea — acaré sin darle demasiada importancia — lo único que me molesta es tener que preparar la maleta.
— ¿Aún no la has preparado?-- preguntó sorprendida — Suficiente, tú definitivamente no estás bien.  Vete a casa, descansa y despéjate este fin de semana. En estas condiciones, perdona que te diga, pero eres un estorbo.
Enfadada me empujó fuera de la sala y cerró la puerta en mis narices, justo después de lanzarme mi bandolera. A veces no la entendía. ¿Qué más le dada lo que yo hiciese?

Un poco molesto, decidí irme a casa; lo de descansar no era mala idea. Pero, nada más salir, unas manos me taparon la boca y comenzaron a arrastrarme pese a todo mis intentos de resistirme, hacia la parte de atrás del club de jardinería. Una vez allí, pude ver a mis secuestradoras.

— ¿Os hacéis una idea del susto que me habéis dado? — estaba alterado, por un momento me había preocupado de verdad. Desde luego que Nacu y Sunset no estaban bien de la cabeza. Entre pasear por la calle con katana y dinamita, y ahora este secuestro exprés, cada vez me cuestionaba más el estado de su salud mental.
— Shhh — me mandó a callar con su dedo índice frente a su boca — dijo Nacu mientras le brillaban los ojos. Perfecto, había despertado su curiosidad, y solo había una cosa que lo hacía… el BL.  -- Nos tienes que explicar muchas cosas, señorito
— Sí, chaval, hoy habíamos quedado con Castiel y Lysandro para ir a una tienda de música, pero Castiel no ha venido. ¡Él nunca pierde la oportunidad de ir a una tienda de música!¡Cómo no lo pueda violar por tu culpa te voy a…! — y así, una vez más, los gritos de Sunset me dejaron paralizado. Lo decía con una cara tan seria… casi parecía que lo decía en serio.
— Sunset-chan, relájate—  Nacu le dio unas palmaditas en la cabeza para relajarla y ésta pareció ronronear como un gatito. —Le hemos preguntado a Lysandro pero ha dicho “ayer tuvo cierto incidente y no creo que esté de humor” y como es tan explicito dijo eso y se fue. Así que solo nos quedabas tú,  porque últimamente han pasado cosas entre vosotros y no podéis negarlo. — tras decir eso su rostro mostró una maliciosa sonrisa que expresaba muchas cosas menos confianza.
— ¿Cómo os enteráis de todo? — pregunté con nerviosismo, en tan poco tiempo… era imposible.
— ¡AH!¿Qué es cierto? Yo es que estaba lanzado un farol — Nacu comenzó a reírse en toda mi cara y Sunset no paraba de repetirme que era idiota.

Pues sí, lo era, debería aprender eso de negarlo todo hasta el final.

-¡KYYYAA! ¡Cuenta, cuenta! ¡Queremos todos los detalles! – gritó Nacu, histérica, totalmente fuera de sí. Perfecto, ya estaba en su mundo BL y era imposible recuperarla.
— ¡No fue nada! Solo nos encontramos ayer en el instituto por la noch… - me callé unos instantes, sin duda era mejor evitar esa palabra - tarde y tuvimos unas palabras. ¡Eso es todo! – giré la cabeza para no mirarlas, seguro que tenía la palabra “mentira” escrita en la frente. De ninguna manera podría contarles lo que en realidad ocurrió. ¡Sería mi fin!
— Sí, claro… — Sunset se lanzó sobre mí, arrebatándome la tirita de cuello. Todo mi esfuerzo a la mierda. – Palabras no verbales querrás decir— ni siquiera era capaz de quitármela de encima. Adiós a mi orgullo masculino.

— Ostras, pero eso no es un chupetón, es un cardenal. ¡Qué tío más bestia! Nathaniel, tú… — Nacu dudó unos instantes, como si no fuese capaz de encontrar las palabras. Se mordió el labio un par de veces, pero por muy preocupada que pareciese, sabía que en el fondo le encantaba la situación. Seguramente ya tendría miles de fantasías depravadas en su cabeza. Yo,  por el contrario, me moría de vergüenza. “Espero que no pregunte lo que creo que va a preguntar” pensé incontables veces.
Ahora fue Sunset, una se hubo quietado de encima de mí, quien empezó a hablar.
— Que si te lo has tirado. Vamos, que si te ha petado el… — “matadme”.
— ¡No seas ordinaria! — afortunadamente,  Nacu la interrumpió antes de que pudiese terminar. Sunset puso los ojos en blanco como si lo que hubiese estado a punto de decir fuese de lo más normal.
Aún era incapaz  de comprender como podía soltar aquellas cosas sin el menos pudor.
— Vale, vale. Nathaniel, ¿eres virgen? — pronunció aquellas palabras sin estar muy segura de la censura.

— ¿Qu- Qué? — tartamudeé nervioso sin saber muy bien que decir,  las dos me observaban,  sin pestañear, atentas a mi respuesta mientras yo no hacía más que acordarme de Castiel. ¡En menudo lio me había metido el muy desgraciado!
Cerré los ojos unos instantes hasta que tuve el valor de contestar.
— ¡Por supuesto que sí! — afirmé con un nudo espantoso en la garganta.

No sé si fue mi imaginación, pero juraría que vi cierta decepción en sus caras. Tener amigas para esto.

— ¿Decepcionadas?
— No, que va… - dijeron al unísono mientras desviaban la mirada.

Lo estaban. Malditas zorras. Suspiré. Seguía sin entender porque querían que acabase con Castiel.
Espera, espera. ¿Pero yo me estaba escuchando? ¿Acabar? ¡JÁ!  Nunca, ni en un millón de años. ¡Qué no! No me había planteado tener pareja y menos un tío. A mí siempre me habían gustado las mujeres… Creo. Bueno pero los hombres nunca. En cambio con Castiel…

“¡Yo me cago en Castiel y en su puñetera madre!” Lo que me faltaba, dudar de mi sexualidad.

— Nathaniel,  sabes que yo apoyo esta hermosa relación, os ayudaré todo lo que me sea posible — A Nacu le volvían a brillarle los ojos como si tuviese llamas en su interior.
— Sí, ya, bueno. Eso acláralo con él, seguro que piensa lo mismo —  Sunset rebuscó en su mochila buscando algo hasta que finalmente sacó un paquete y me lo tendió. — Toma, de parte de Castiel, se lo dio a Lysandro y éste nos lo ha dado a nosotras para que te lo entreguemos.
— ¿Qué es? — pregunté, desconfiado ante aquel pequeño envoltorio sin demasiada consistencia.
— Es un paquete. ¿No lo ves? — respondió Sunset al instante.
— Eso ya lo sé. Me refiero al contenido — a veces me daba la impresión de que me trataba como un idiota.
— Está cerrado, no tenemos rayos láser. — comenzaba a irritarse. Ya me la estaba viendo saltando de nuevo sobre mí, pero esta vez para estrangularme.
— Dejadlo ya; y tú abre el dichoso paquete — la intervención de Nacu hizo que nos detuviésemos, aunque seguimos mirándonos un rato con cara de pocos amigos.

Lo abrí sin demasiado cuidado. No parecía algo frágil y tampoco tenía gran tamaño. Cuando terminé de abrirlo pude ver mi corbata con una nota encima.

“Hey señorito delegado, si sigue olvidando cosas como esta por ahí, acabaran descubriendo sus malos hábitos.
P.D.: La próxima vez me aseguraré de que podamos llegar hasta el final sin que nos interrumpan.”

— Nathaniel, no quiero preocuparte, pero tienes totas las papeletas de ser el uke…—  apenas podía escuchar la voz de Nacu. En realidad no podía escuchar nada…

¿Uke? ¿Final? ¿Qué carajo significaba todo aquello? Me sentía como si acabase de dar cien vueltas sobre mí mismo.

4 comentarios:

Gemma de la Casa Lannister dijo...

Bueno, pues si le han drogado con el café, con todo el que ingiere, creo que ya hubiese muerto por sobredosis xDD
Jajajajaja He muerto xD Qué por qué le mira siempre tanto Melody... Nath, creo que el café te está volviendo gilipol**s, de verdad xD Jajajaja Mosquito pelirrojo con cara de pervertido LOL
Diossss Sunset es la ostia (Sí, hoy me ha dado por los tacos, soy muy mal hablada, lo sé... ¡Júzgame si quieres! xD) Es mi ídolo de ir al grano *.*
"¡Me cago en Castiel y en su puñetera madre!" -Frase que quedará grabada en mi mente de por vida, tengo examen mañana y pondré eso en vez de el monje del renacentismo ¬¬
¿Sabes? Por un momento pensé que en la caja iba a haber preservativos O_o... Aunque creo que a Nath le ha causado la nota la misma reacción xDD
(Lo sé, soy muy mal pensada -_-'')

Unknown dijo...

jajajajajaja yo creo que la droga es "de otro efecto" jujuju
Siii lo del mosquito me encantó >__< mosquito chupoctero.. uy, que mal sentido tiene eso xDD
Precisamente lo del mosquito fue idea de Sunset (si, existe, es amiga mia y MUY directa xDD)
No te preocupes por mal pensar de la caja, mi amiga pensaba que habría un vibrador la muy bestia xDD lol Nath... con vibrador... oh dios...
jajajaja al monjo del renacentismo podrias ensearle el fic a ver que cara pone xDD

Lady Vengeance dijo...

Mi nariz sangraaaaaaaaaaa!!!!! *-*

Unknown dijo...

DDD : *le da un pañuelito* Pero no manches nada!! xD

Publicar un comentario

Con la tecnología de Blogger.